¿Qué es el crecimiento cero?

El crecimiento cero describe un equilibrio entre la oferta y la demanda para garantizar que los bienes estén disponibles y sean asequibles.

A veces conocida como economía de estado estacionario , el crecimiento cero es un tipo de teoría económica que tiene que ver con la creación de un estado o estatus específico dentro de la economía. En concreto, la idea es hacer uso de todas las actividades y políticas económicas para que se logre y mantenga un estado de equilibrio durante un período de tiempo. La idea es que al alcanzar este equilibrio, la oportunidad de colapso económico se minimiza, haciendo que surja la posibilidad de una recesión o algún otro tipo de patrón indeseable. Si bien el crecimiento cero es considerado un objetivo deseable por varios economistas, otros no están de acuerdo en que este estado sea la mejor opción a lo largo del tiempo y consideran que los cambios en la economía son cruciales para el progreso en áreas tecnológicas y de otro tipo.

Con un crecimiento cero, se logra un equilibrio entre la oferta y la demanda que garantiza que los bienes y servicios deseables estén fácilmente disponibles y sean asequibles. Al mismo tiempo, este estado también tiene la característica de una baja cantidad de desempleo en un momento dado. Como resultado, la economía en general se mantiene fuerte, con muy pocos cambios en términos de crecimiento o pérdida en el transcurso de cada año calendario. Los eventos con el potencial de desencadenar inflación o recesión se mantienen al mínimo, y los controles y equilibrios naturales dentro de una economía saludable compensan cualquier impacto que esos eventos puedan generar en el corto plazo.

Los defensores del crecimiento cero creen que la consistencia proporcionada por este tipo de condición económica es superior al modelo de crecimiento continuo, ya que el crecimiento rápido y continuo generalmente conduce a períodos en los que el auge de la economía se derrumbará repentinamente. Cuando esto ocurre, las empresas comienzan a despedir empleados; los precios suben; y el desempleo aumenta, a veces hasta cifras alarmantes. Si bien el impacto de estos eventos se puede corregir con el tiempo, el proceso puede llevar años. Mientras tanto, es posible que las personas que viven dentro de una nación que atraviesa una recesión económica no puedan permitirse comprar alimentos, pagar el alquiler o cumplir con los pagos de la hipoteca, o mantener un nivel de vida equitativo en general.

Los críticos del crecimiento cero señalan que, si bien el concepto tiende a eludir la aparición de una serie de problemas económicos, a menudo se logran avances frente a la adversidad. Es probable que la tecnología en particular se desarrolle durante las recesiones económicas, lo que en última instancia conducirá a nuevas industrias y productos que ayuden a hacer avanzar la economía. Desde esta perspectiva, el movimiento ascendente y descendente de la economía de una nación a lo largo del tiempo puede considerarse necesario para promover avances en la mayoría de los aspectos de la sociedad de vez en cuando.