¿Qué es la integración vertical?

Los minoristas pueden ser propietarios de sus propias cadenas de suministro como parte de sus empresas minoristas.

Una integración vertical es la unión de dos empresas que se unen para crear una cadena de valor que permita a todas las partes disfrutar de los beneficios del negocio mientras comparten los costos y riesgos. Varios factores pueden ser la motivación para entrar en una integración vertical, como los costos de los bienes y servicios producidos o la diferenciación de mercado asociada con cada socio. La elección de celebrar un contrato de trabajo de este tipo permite que ambas partes disfruten de una entrega de servicio más rápida con la distribución de un producto, y así aumentar el margen de beneficio al generar ventas adicionales.

Hay varias áreas en las que una integración vertical puede ser de beneficio mutuo para ambas empresas. Una de esas áreas es la obtención de materias primas para la producción de los bienes y servicios ofrecidos por cada empresa. Juntas, las dos empresas pueden participar en un esfuerzo conjunto de exploración y compra de estos materiales. Al realizar esta tarea de búsqueda y recuperación juntas, los costos se reducen al mínimo. Esto resultará en un menor costo total por unidad producida, lo que significa más ganancias en el punto de venta para el proveedor y posiblemente un costo por unidad con descuento para el comprador.

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Otra área en la que una integración vertical puede ser mutuamente ventajosa es en el proceso de distribución de los productos finales. Ambas empresas pueden trabajar juntas para asegurar los puntos de venta minoristas que transportarán los bienes producidos por ambas entidades. Esto también puede permitir a los socios ahorrar dinero en costos de distribución como el transporte, así como ayudar a ambas entidades a ingresar a mercados minoristas que pueden haber estado cerrados a una o ambas compañías en el pasado.

En esencia, la integración vertical puede ser un medio excelente para gestionar un mayor nivel de rentabilidad tanto para el proveedor como para el cliente. Al trabajar juntos, es posible que el proveedor incurra en menos costos en el proceso de producción y transfiera parte de los ahorros al cliente. Al mismo tiempo, el cliente trabaja con el proveedor para abrir mercados minoristas adicionales en beneficio mutuo de ambos.

 

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