Significado y funciones del GPA en la educación

Un promedio de calificaciones, o GPA, es el sistema que muchas escuelas usan para clasificar el desempeño académico de los estudiantes. Cada calificación que obtiene un estudiante se pondera de acuerdo con una escala uniforme, de modo que un solo número se puede usar para expresar las calificaciones obtenidas durante un semestre, año o incluso toda la carrera académica. Un GPA generalmente se considera como una indicación aproximada de las habilidades de un estudiante y, a menudo, sirve como una forma de clasificar y distinguir a las personas para fines de admisión a la universidad, premios de becas y entrevistas de trabajo. El número no se usa en los sistemas educativos de todos los países, y no todos los países o escuelas usan las mismas escalas.

Aunque la influencia de una transcripción disminuye con el tiempo, una mala puede afectar la primera búsqueda de trabajo de un recién graduado.

Conceptos básicos de cálculo

Muchas instituciones académicas de todo el mundo utilizan un sistema de calificación de letras para la evaluación de los estudiantes. En este modelo, una "A" representa un trabajo ideal, una "B" o una "C" se puede otorgar por el trabajo que cumple con el estándar, y una "D" generalmente se reserva para el trabajo que de alguna manera es deficiente. Por lo general, se otorga una "F" solo por fallas. La mayoría de los sistemas no utilizan la letra "E".

Un GPA generalmente se considera una indicación aproximada de las habilidades de un estudiante.

El GPA se calcula asignando un valor numérico a cada calificación obtenida. Las diferentes escuelas pueden usar escalas ligeramente diferentes, pero la mayoría asigna "puntos" a las calificaciones con letras, como las siguientes:

El GPA de un estudiante se calcula a partir de las calificaciones que recibe de todos sus maestros.

F = 0 puntos
D = 1 punto
C = 2 puntos
B = 3 puntos
A = 4 puntos

Tener en cuenta las ventajas y las desventajas

Las escalas de calificación que hacen uso de ventajas y desventajas, donde un estudiante podría obtener una A-, por ejemplo, o una C +, a veces hacen modificaciones a la escala para tener en cuenta estos valores intermedios. Un A- podría ser un 3.6, por ejemplo, mientras que un C + probablemente sería un 2.3.

A menudo existe cierta controversia cuando se trata de la designación A +. No todas las escuelas reconocen una A + y, en la mayoría de los casos, el llamado GPA “perfecto” (en una escala de 4 puntos) es de 4.0. Algunas escuelas otorgarán un valor de 4.3 a una A +, mientras que otras eligen quedarse solo con un 4. Como tal, algunos estudiantes pueden tener promedios de calificaciones superiores a 4.0, mientras que otros pueden obtener un 4.0 sin haber obtenido todas las As - como sería el caso de un estudiante que obtuvo tres notas A- junto con tres A + s, por ejemplo.

Cálculo y ponderación

El GPA generalmente solo se calcula en función de las calificaciones finales obtenidas y, como tal, es una forma única de expresar el desempeño general de un estudiante. En lugar de decir que un estudiante obtuvo una A, dos B y una C, se diría que obtuvo un promedio de 3.0 durante el semestre, trimestre o año. La expresión de las calificaciones de una sola clase todavía suele ocurrir en términos de letras. Sería más correcto decir "obtuvo una A en química", por ejemplo, que "obtuvo un 4.0 en química".

Las cosas se complican más cuando las clases tienen diferentes valores de crédito. Si la química es una clase de cuatro créditos, por ejemplo, una A obtenida allí debería, y generalmente lo hace, contar más que una A obtenida en un curso de dos créditos. Para compensar esta diferencia, las escuelas generalmente calculan el GPA por horas de crédito.

Going back to the example above, if a student earned an A in a four-credit course, Bs in a four-credit course and in a two-credit course, and a C in a three-credit course, her overall GPA would be calculated as follows: (4 x 4) + (4 x 3) + (2 x 3) + (3 x 2), all divided by the total number of credits — in this case, 13 — for a total of 3.07.

Significance Within Academic Circles

Grade point averages are often used within schools to rank students. They may also be the basis of scholarship awards, graduation honors, and other academic accolades. Along with standardized test scored, GPAs are often the most efficient way to assign students a numeric value, thus quantifying their perceived ability when it comes to academic success and problem-solving skills. Most colleges and universities consider grade point averages very heavily when making admission decisions. Graduate and professional schools are usually the same way. Though a final decision to admit or deny a student often comes down to individual characteristics and personal essay responses, high GPA and test scores are often essential to advancement in early stages.

Significance in Future Life

The value of a grade point average is rarely something students can close the door on once they graduate. Most entry-level jobs want to see school transcripts, and employers often make hiring decisions influenced at least in part by academic success. This is particularly true in professions that require precision, such as law and medicine. Simply attending a good school is not always enough — students must also usually show that they earned top grades in order to get the field’s top jobs.

Of course, there does come a natural point at which GPAs begin to lose their value. Over time, a person’s professional record begins to stand for itself, and grades earned years ago fade into history. Until experience has a chance to trump learning, however, grades stay important, often longer than students would like.

Standardized tests scored do not always reflect the same level of achievement as a student's GPA.